Helados de invierno


La felicidad es decidirte a tocar lo que siempre te habías resignado a mirar. Hoy, en el Mercado N° 2 de Surquillo, no pude resistirme y compré estas cositas maravillosas, recontra peruanas, de colores de cuento y proporciones de juguete. Son los helados de invierno, barquillitos con marshmallow que cumplen lo que prometen: no derretirse nunca y nunca enfriarte la lengua si, como sucede la mayor parte del año, no ha salido el sol. Helados a prueba de decepciones.



Vienen también en versión sándwich de wafer. Que ya no existe, pero cuando era niña era casi tan popular como el sándwich de chocolate, con galleta. Que, por supuesto, eran mucho más ricos que los de ahora; la galleta era sólida y de un chocolate oscuro, sabroso. El helado se escurría entre las tapas. Era un reto exquisito. Estos sándwiches de helado de invierno, en cambio, nunca te mancharán la ropa.


Micael no lo podía creer.


Tal vez un día de estos me decida a probar los otros helados de invierno, que siempre me han hecho guiños desde las calles del centro. Están hechos de un merengue cremoso, amarillo patito, y los sirven, como quien juega a la comidita, en los mismos barquillitos preciosos. Pero eso de comer clara cruda de un puesto ambulante va a implicar un salto de fe. Bueno, un saltito. Pero salto al fin y al cabo. ("Aquellos que miran antes de saltar, nunca saltan", era una de las cosas que tenía escritas en la pared de mi cuarto cuando andaba buscándome desesperadamente. Por algo habrá que empezar.)

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5 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo que extraño de los helados, es mancharme la ropa y los mashmelows en la fogata, aunque ahora con tus helados conceptuales si los hubiera comido de niña me hibiera ahorrado convertir mi polito blanco en manchas de cacao.

Alessandra Pinasco dijo...

Hola Anónima!
Gracias por escribir. Si, quien no se ensucia no goza. Comer helado sin embarrarse es sinónimo de madurez, y quién quiere eso? Pero tienen gracia estos juguetitos, no?

Anónimo dijo...

Me gusta la idea de los helados de invierno, pero mas me gusta mancharme de crema la boca cuando como los helados de verano! nada como los de crema, los de hielo hacen q se me enfrien muchos los dientes.. hagamos helados de crema calientes!!
Gracias Ale por mandarme este bolg, es excelente y aveces me relaja por unos minutos de todo el estres diario.. gracias! Daniella V.

Alessandra Pinasco dijo...

Hola Daniella! Uy sí, helados calientes es una paradoja maravillosa...
Gracias a ti por escribir, qué lindo tenerte aquí.
Besos,
A

Anónimo dijo...

holaaa, me gustaria saber la receta o algo, me llama bastante la tencion y mi novio es peruano y quisiera sorprenderlo con los recuerdos ya que estamos en españa :) un beso